Por Silvana Minue-El barrio AKAR en Ushuaia atraviesa falta de agua potable, por lo cual vecinos y vecinas elevaron una nota a las autoridades de la DPOSS y del Ministerio de Obras Públicas para que puedan ocuparse y solucionar el tema.
Los habitantes de esa zona, han presentado notas, también llamados telefónicos a distintas autoridades de la DPOSS, presidente y vicepresidente, a técnicos que se presentaron en nombre de las autoridades a resolver problemas, a Defensa Civil, al teléfono de Reclamos DPOSS, al Ministerio de Obras Públicas, pero «lo cierto es que no tuvimos respuestas concretas a los múltiples reclamos», indican en el escrito.
El provisionamiento de agua, como la reparación y acondicionamiento adecuado de la red, sigue siendo una deuda de la DPOSS, vulnerando un derecho primordial como es el acceso al agua para consumo humano. Asimismo, los vecinos y las vecinas sostienen que no se cumple con lo pautado durante el año pasado por la ministra de Obras y Servicios Públicos, Gabriela Castillo, de que un camión aguatero brinde el servicio «a demanda» y «tan solo ha venido una vez por semana, y ahora durante el transcurso del año, poco más de una vez».
Cabe recordar que, durante el año 2020, la Dirección de Obras y Servicios Sanitarios (DPOSS) intimó a la empresa Urbanizadora Grupo G7 para que en un plazo de 5 días hábiles presente toda la documentación que respalde las obras realizadas en el Barrio Akar conforme a las exigencias técnicas y las normativas vigentes. Una medida dispuesta luego de las reuniones entre la ministra de Obras y Servicios Públicos, autoridades de la DPOSS y la Urbanizadora Grupo G7 y posteriormente con vecinos del barrio debido a la falta de servicios de agua y cloaca en ese lugar.
En la nota solicitan conocer los avances sobre la intimación realizada al urbanizador, GRUPO G7 SRL, y la documentación respaldatoria de las obras, dicha «información de carácter público, con contenido ambiental (artículo 41 CN)».
«Jamás tuvimos una repuesta concreta»
Claudio, uno de los vecinos explicó a TIEMPO FUEGUINO que «jamás tuvimos una respuesta concreta de parte de las autoridades directas para que solucione el suministro de agua». Y mientras tanto «se pasan la pelota» entre el Gobierno y las empresas cuando hay familias ubicadas en la zona alta que se autoabastecen con una bomba conectada a la red, y a su vez abastecen un tanque cisterna.
«Hablamos de algo vital, que es el agua», aseguró y cuestionó como se aprobaron los lotes con un tendido de red. «Alguien lo autorizo, ahora dicen que hay irregularidades», remarcó.
«Por ahora nos queda esperar a la última nota, jamás nos citaron. No pedimos más que se regulariza además tenemos el gran inconveniente que también se olvidaron del barrio con la transitabilidad en las pendientes, con nieve y falta de limpieza», finalizó.
Impugnaciones al decreto
Otra situación que trajo malestar es la medida del Gobernador Gustavo Melella de establecer que todo loteo o subdivisión con cesión de superficie con destino al uso público, de tierras públicas o privadas en área urbana que implique la creación de macizos deberá contar con la provisión de la infraestructura de servicios básicos, como red de agua domiciliaria; red de alumbrado público; red de energía eléctrica; red cloacal domiciliaria; red de gas domiciliaria y apertura de calles.
Se planea una impugnación al artículo Nº4 del Decreto en que indica que «tramitarse planos de mensura sobre fracciones de tierras que no posean los servicios de infraestructura básica descriptos en el artículo 2º, dichos planos serán registrados por la Dirección Provincial de Catastro, incorporándose en los mismos una nota que diga: «El registro del presente plano no exime al titular registral de la obligación de ejecutar las obras de infraestructura básica».
Si bien el decreto puede ser una solución para futuros barrios, no lo sería para aquellos como el barrio Akar, donde consideran que el estado no quiere responsabilizarse dejando solo como responsable al privado.