El legislador Federico Sciurano, al evaluar la situación electoral del radicalismo en la provincia, identificó una parte sustancial del problema en la actitud del referente de la alianza nacional, Mauricio Macri.
Sciurano, por FM Master’s, manifestó: que “en mayo pudimos percibir ciertas actitudes que hoy son las actitudes que han trascendido a nivel nacional. Creo que el presidente Macri fue un gran constructor hasta por lo menos este año, fue una persona que logró en su momento generar un espacio trascendente”.
Sin embargo, el legislador expresó su desencanto con las acciones recientes de Macri, sugiriendo que el expresidente no estuvo a la altura de las necesidades actuales de Argentina y de Juntos por el Cambio. En sus palabras, “en lo que ha venido pasando a lo largo de este proceso electoral, claramente el presidente Macri no ha estado a la altura de lo que la Argentina necesitaba y particularmente de lo que Juntos por el Cambio necesitaba en este nuevo proceso”.
Sciurano también reflexionó sobre la evolución de la política argentina en las últimas décadas, destacando el fin del sistema bipartidista: “La nueva realidad política argentina, que rompe la inercia de la década del 80 y del 90 de un bipartidismo que era el radicalismo y el peronismo, a partir de la crisis del 2001 se transformó en una nueva realidad política que era el bicoalicionismo”.
El legislador expresó su creencia de que Macri debió ser más respetuoso en su respuesta después de las elecciones, argumentando que la democracia se basa en la credibilidad: “Macri debió haber sido más respetuoso el día después de la elección de poder transmitir la mirada de estadista que Argentina necesita para poder darle contención a ese gran espacio”.
Incluso también subrayó la importancia de la mística de Juntos por el Cambio y cómo se había desvanecido debido a percepciones negativas: “Juntos por el Cambio había logrado marcar una mística distinta en la construcción política y cuando el argentino percibió las motivaciones, los manejos en las provincias, que lamentablemente me tocó vivir esa realidad”.
El legislador destacó cómo, en el pasado, la marca de Juntos por el Cambio fue suficiente para ganar apoyo, independientemente del candidato: “Solamente con la marca era suficiente, entonces no importaba quién era el candidato porque con la marca iba a llegar a los lugares de poder”.
En este contexto inscribió la dura derrota electoral reciente que llevó a perder la banca de Juntos por el Cambio de Tierra del Fuego en la Cámara de Diputados: “No es casualidad que la bancada de Frigerio se haya perdido con niveles electorales bajísimos, porque se ha perdido la sintonía con lo que está pasando. Lamentablemente las pasiones personales terminan disminuyendo la posibilidad de que lo que gente hoy necesita que se le preste atención, termina en un cuarto o quinto plano”.
Sin embargo, según dijo, esta percepción cambió debido a la percepción de que los objetivos políticos prevalecieron sobre el bienestar del país y la unidad del espacio: “Eso termina concluyendo en esta necesidad de destruir política a dirigentes de peso y significativos que tienen experiencia de gobierno”. Esto, finalmente, resultó en una gran pérdida de votos: “Un espacio político que había superado en algunas elecciones más de 50 puntos, en esta oportunidad, después de todos los agravios, las cosas que se dijeron, haber perdido la brújula, el nivel de agresividad, terminó detonando en que esa realidad hoy fueron esos 23 puntos”.
En relación con las declaraciones y el comportamiento de Macri y el candidato Javier Milei, expresó su insatisfacción con la agresividad verbal y el daño causado a la credibilidad: “Macri no estuvo a la altura, ese tipo de manejos está más para un club de fútbol que para una realidad nacional. Me pareció muy irrespetuoso para mi partido”.
En última instancia, Federico Sciurano advirtió sobre los efectos de tales comportamientos en la credibilidad y la lógica de la política: “En algún punto hemos perdido la lógica de lo que significa para un dirigente hacer uso de un espacio público”.
