Los 19 gremios que integran la Federación Marítima, Portuaria y de la Industria Naval (Fempinra) y que lidera Juan Carlos Schmid decidieron ayer un paro nacional de 24 horas para el jueves 24, con movilización hacia el Ministerio de Trabajo, en rechazo de «la grave situación de la actividad y el plan económico que castiga a los trabajadores», entre otras demandas, informó el secretario de Prensa de la organización, Luis Rebollo.
Los trabajadores paralizarán las tareas durante toda la jornada del jueves próximo y marcharán hacia la cartera laboral de la Avenida Leandro N. Alem al 600 en rechazo del «ajuste económico, el regreso al Fondo Monetario Internacional (FMI), el proyecto de modernización del Puerto de Buenos Aires y la situación de la actividad», puntualizó.
Un documento gremial firmado por el consejo directivo nacional de la Fempinra sostuvo hoy luego de un extenso encuentro sindical en la sede de Combate de los Pozos al 200, que durante años y bajo distintas administraciones «la organización formuló propuestas de resolución de los desafíos que implica el nuevo perfil del comercio exterior».
«Hacia fines de 2017 el Poder Ejecutivo vetó instrumentos que procuraban recuperar la industria naval y la marina mercante, resignando de esa forma la presencia de la bodega nacional en aguas propias y la construcción naval en los astilleros locales. Los proyectos de transformación para las inversiones en el perímetro portuario (como las concesiones) no otorgan precisiones y seguridad respecto del empleo, en un contexto sacudido por la crisis financiera y el reingreso al escenario nacional del FMI», afirmó.
Los gremios añadieron que «los trabajadores saben en carne propia que su recetario envió a la calle a portuarios en 1994; a marítimos con la privatización de ELMA y la flota fluvial y a navales con la destrucción de la industria», y expresaron que siempre «se esgrimió como razón el tema fiscal, el cierre de las cuentas públicas y el equilibrio del país, pero esa Nación son hombres y mujeres y no meros números», argumentó.
«Siempre la razón fue el bendito costo laboral, pero fue ese costo el que provocó la corrida bancaria que alentó la especulación y el dinero fácil, que en lugar de ayudar a la producción se esfuma en manos de los vivos de siempre», se preguntó la Fempinra.
También sostuvo que «la verdadera razón es que el programa económico no funciona, la inflación no cede, el consumo cae, los servicios aumentan y el pueblo trabajador es víctima de los errores cometidos, por lo que los gremios de la actividad decidieron un paro de 24 horas para el jueves 24, a partir de las 10, con marcha hacia Trabajo».
La Fempinra, que conduce el también triunviro cegetista Schmid, exigió «la plena reactivación de los astilleros de Río Santiago y la prórroga de las actuales concesiones del puerto de Buenos Aires hasta que concluyan las obras de infraestructura de la terminal exterior, y rechazó los despidos y los vetos a las leyes de la industria naval y marina mercante, en tanto cuestionó «los acuerdos pesqueros con los países nórdicos y Gran Bretaña porque lesionan el interés nacional y descuidan la soberanía, el recurso ictícola y la renovación de la flota pesquera argentina», puntualizó la organización.
Del mismo modo, reclamó «la aplicación de políticas de igualdad de condiciones para la producción de arena y empresas de dragado y el saneamiento del servicio de transporte fluvial de pasajeros del delta bonaerense, que afecta a 15.000 personas aisladas y a cientos de familias que carecen de los servicios esenciales de educación y salud». La Fempinra demandó «la participación de los trabajadores en las negociaciones de los tratados de transporte del Mercosur con la Unión Europea (UE) y el abastecimiento de combustibles para búnker a fin de garantizar la continuidad de la actividad y de los empleos», y denunció que en «las últimas ordenes de reparación de armadores locales Tandanor produjo sobreprecios nunca vistos, lo que constituyó casi una provocación para vaciar de contenido la planta, por lo que los armadores huyeron y decayó la producción».
«¿Querrán las tierras de los astilleros y puertos para el negocio inmobiliario? Ante esta grave situación, la Fempinra solicita un pronunciamiento de la CGT», concluyó.