“No creo que haya algo político, arrancó por un enojo de varios choferes y no paró más, esa es la realidad”, dijo el concejal Gabriel de la Vega.
Un reclamo de remiseros de la agencia Carlitos derivó en un piquete sobre avenida San Martín y Rosas, debido a la finalización de la relación contractual que mantenían con la empresa Esperanza.
La empresa decidió no renovar el contrato de algunos choferes, mientras que los propietarios hablan de despidos.
Los manifestantes anticiparon que se iban a quedar hasta que sean reincorporados mientras desde la empresa señalan que no están dispuesta a renovarles el contrato para que presten servicio nuevamente.
Tanto el concejal De la Vega, como Javier Branca, intentan destrabar el conflicto, pero ayer, luego de un encuentro con los remiseros, el intendente Walter Vuoto decidió que hasta que no se solucione, quedará suspendida la renovación de las plazas, con vencimiento operativo y la consecuente pérdida de la misma.
“Estamos hablando de una ordenanza de hace más de 30 años cuando éramos comuna, que ha quedado obsoleta y eso lo tenemos que trabajar”, dijo De la Vega, en relación al proyecto que se envió a la comisión 4.
Y advirtió que “por ahora se decidió la suspensión de renovación de plaza a las agencias hasta que se resuelva el conflicto, y darle la posibilidad a estos 4 choferes que transfieran la licencia, y que por 45 días que no se toque a nadie, y que no les cobren el canon de uso, ente otros puntos. Pero los trabajadores no accedieron y sigue el conflicto”.
“Esperanza es una empresa con prestigio, pero los trabajadores tienen otra verdad. Creo que hay que modificar esa ordenanza porque está obsoleta, no va a salir ya”, dijo el concejal por Fm Masters.