Fabricio Bussolini, argentino de 41 años y gerente de una empresa de energía solar en Chile, falleció tras caer 200 metros mientras hacía trekking en el volcán Llaima. La investigación continúa para esclarecer las circunstancias del accidente.
Un trágico accidente ocurrió el sábado pasado en el volcán Llaima, ubicado cerca del límite con la provincia argentina de Neuquén, cuando Fabricio Bussolini, un argentino de 41 años, cayó aproximadamente 200 metros mientras practicaba trekking. Bussolini, quien también tenía nacionalidad chilena, se desempeñaba como gerente general de una empresa de insumos para la generación de energía solar en Chile.
Horas después del accidente, Bussolini fue rescatado en helicóptero a más de 2400 metros de altura y trasladado al Hospital Regional de Temuco, en la región de La Araucanía. A pesar de los esfuerzos médicos, falleció este martes cerca de las 16 horas debido a la gravedad de sus heridas.
El rescate fue llevado a cabo por Carabineros y un cuerpo de bomberos del pueblo de Cherquenco, quienes, según medios chilenos, realizaron «un verdadero esfuerzo heroico» para llegar al lugar del accidente. La operación requirió la utilización de un helicóptero y especialistas en rescate en alta montaña.
Las autoridades locales están investigando las circunstancias exactas del accidente. Aunque se sospecha que Bussolini pudo haber perdido el equilibrio y caído por la ladera del volcán, no se descarta la posibilidad de otros factores que pudieron haber contribuido a la tragedia. Un dato que ha llamado la atención de los investigadores es que ni el argentino ni las personas que lo acompañaban se registraron en ninguno de los accesos al Parque Nacional Conguillío, donde se encuentra el volcán.
Héctor Muñoz, director regional subrogante de la Corporación Nacional Forestal (CONAF), confirmó la falta de registro, lo que agrega una capa de complejidad al caso. Las investigaciones continúan para determinar qué pudo haber sucedido.
El volcán Llaima es considerado uno de los más activos de Chile, con una altitud de 3195 metros, y está situado en la zona precordillerana de La Frontera, a poco más de 70 kilómetros hacia el noreste de Temuco. Debido a su actividad, el volcán está bajo constante vigilancia por parte de las autoridades chilenas.
Fabricio Bussolini había nacido en Villa Gobernador Gálvez, Santa Fe, Argentina, y era licenciado en Gestión y Administración de Empresas por la Universidad Nacional de Rosario. Su carrera profesional lo llevó a obtener la nacionalidad chilena y a desempeñarse como gerente general de Enertik Chile SPA, una empresa dedicada a la venta de insumos para la generación de energía a través de fuentes renovables y no contaminantes, como paneles solares. Anteriormente, había trabajado como ejecutivo de cuentas en Molinos Río de La Plata.
El cuerpo de Bussolini fue llevado a la morgue del Hospital Regional de Temuco y se determinó su traslado al Servicio Médico Legal para la realización de la autopsia correspondiente. Las autoridades locales y familiares esperan que la investigación esclarezca las circunstancias del accidente que llevó a la trágica pérdida.
Este incidente pone de manifiesto la importancia de las medidas de seguridad y la necesidad de seguir los protocolos establecidos para actividades en áreas montañosas, especialmente en zonas de alto riesgo como el volcán Llaima.