La aerolínea alemana Lufthansa marcó con un gesto administrativo un importante reconocimiento de la soberanía argentina sobre las Islas Malvinas al presentar una solicitud de sobrevuelo y aterrizaje para viajar al archipiélago ante Administración Nacional de Aviación Civil (ANAC) y la provincia de Tierra del Fuego.
«Se destaca la relevancia de la presentación de la solicitud de Lufthansa ante autoridades argentinas, en tanto implica el reconocimiento de las Islas Malvinas como parte del territorio argentino», celebró la Cancillería argentina. El pedido de la aerolínea de bandera alemana es para realizar dos vuelos chárter a las Islas Malvinas.
Los vuelos en cuestión, que ya recibieron aprobación, partirán desde la ciudad alemana de Hamburgo, el primero a realizarse el próximo 1 de febrero y el segundo el 30 de marzo. En ambos casos se designó a Ushuaia como aeropuerto alternativo a las Islas Malvinas, según detalló la Cancillería.
La aerolínea alemana emitió un comunicado de prensa confirmando el vuelo y brindando algunos detalles más sobre el mismo:
Por un lado afirman que será el vuelo de pasajeros más largo en la historia de Lufthansa y uno de los más «singulares».
El vuelo entre Hamburgo y Mount Pleasant recorrerá 13.700 kilómetros.
El tiempo de vuelo se calcula en torno a las 15 horas.
Será realizado en un Airbus A350-900 bajo el número de vuelo LH2574, que actualmente está en Munich siendo preparado.
Llevará 92 pasajeros (todo un lujo considerando que la aeronave tiene 293 asientos), la mitad de los cuales son científicos del Instituto Alfred Wegener y la otra mitad la tripulación del barco para la próxima expedición del Polastern.
El vuelo de regreso partirá desde Mount Pleasant hacia Munich el 3 de febrero y transportará a la tripulación del Polarstern que había partido de Bremerhaven el 20 de diciembre para reabastecer la Estación Neumayer III en la Antártida, y ahora debe ser relevada.
La tripulación y los técnicos de Lufthansa (17 personas en total) se encuentran en cuarentena desde el sábado pasado en Hamburgo, y permanecerán en cuarentena al arribar a las Islas Malvinas. A pesar de las restricciones, informaron que más de 600 empleados se ofrecieron para realizar este viaje.
El Instituto Alfred Wegener compensará las emisiones de CO2 de los vuelos a través de la organización sin fines de lucro de protección climática Atmosfair, que también es el caso de este vuelo en particular. El instituto dona fondos para plantas de biogás en Nepal por cada milla recorrida, reduciendo así la misma cantidad de emisiones de CO2.