El director Ejecutivo de la Unión Industrial Fueguina advirtió
sobre los riesgos del desabastecimiento eléctrico en la provincia
y su impacto en la competitividad de los sectores productivos. La
falta de inversión en infraestructura energética obliga a las
empresas a trasladar producción fuera de Tierra del Fuego.
En una extensa entrevista en FM Master’s, Ramiro Caballero, director
Ejecutivo de la Unión Industrial Fueguina (UIF), delineó los principales
desafíos que enfrenta el sector manufacturero local, con especial énfasis
en la crisis energética que afecta a la provincia. «Es un problema
gravísimo. Las empresas el año pasado tuvieron que parar, en su
gran mayoría», afirmó Caballero, refiriéndose a los cortes y
limitaciones en el suministro eléctrico que forzaron a varias industrias a
frenar su producción.
El dirigente explicó que el sector plástico es uno de los más perjudicados
debido a su alto consumo energético. «Vos podés decir que se
generen ellos mismos, pero el nivel de consumo que tiene una
industria plástica no es lo mismo que una electrónica. La
electrónica genera un consumo importante, pero no los niveles
que puede tener una plástica».
Esta situación, según consignó, llevó a algunas empresas a trasladar
parte de su producción fuera de la provincia. «El año pasado, por
ejemplo, se tuvieron que tomar medidas de producir para
abastecer el mercado, producir fuera de Tierra del Fuego. Y eso
no es bueno», señaló.
Caballero destacó que el problema no se limita a la industria tradicional,
sino que también impacta en proyectos de inversión, como desarrollos
hoteleros en Ushuaia. «Una inversión hotelera en Ushuaia que
también tiene ese problema, no llega a esa inversión. O va a ser
más costosa la misma». En este sentido, remarcó la urgencia de
soluciones a mediano plazo: «Tenemos que estar hablando que en
un año, digo, un tiempo determinado, un año, dos, no sé, pero
tendría que ser nuevamente un problema. No puede ser la
energía un problema en una provincia tan rica como Tierra del
Fuego».
Además de la energía, el entrevistado abordó otros temas críticos, como
el contrabando de celulares -que perjudica al sector electrónico local- y
los costos logísticos e impositivos que encarecen la producción nacional.
Sin embargo, subrayó que, pese a las dificultades, la UIF ha logrado
consolidar un espacio de colaboración entre sus 23 empresas asociadas,
que abarcan rubros como hidrocarburos, plásticos, textiles y electrónica.
Respecto al diálogo con el gobierno, Caballero valoró la comunicación
fluida con autoridades provinciales y nacionales, aunque insistió en la
necesidad de acelerar proyectos clave, como las obras de infraestructura
energética financiadas por el Fondo para Ampliación de la Matriz
Productiva (FAMP). «Si vos tenés un proyecto aprobado para la
energía de Ushuaia, que bajen los fondos», reclamó.
La entrevista cerró con una reflexión sobre el modelo productivo
fueguino: «No miramos solamente el mapa de lo que fabrico.
Tratamos de pensar en qué tipo de provincia queremos tener en
el futuro». Una visión que, según Ramiro Caballero, requiere resolver
urgentemente la ecuación energética para no seguir perdiendo
competitividad.