Por Guillermo Worman.- El anuncio de la empresa naviera TABSA de cobrar exclusivamente en dólares y pesos chilenos ha generado preocupación y descontento en la población de Tierra del Fuego. La logística de la Isla Grande Tierra del Fuego, caracterizada por su conexión terrestre con el continente a través de territorios chilenos, depende en gran medida del transporte de carga por tierra.
Ante esta situación, es imperativo que las autoridades nacionales argentinas aborden rápidamente este problema, ya que está en juego tanto la calidad de vida de los fueguinos como el ejercicio de la soberanía sobre el Atlántico Sur.
Tierra del Fuego desempeña un papel estratégico como principal puerto de cruceros turísticos antárticos de Argentina y cabecera de abastecimiento al continente blanco. Por lo tanto, la fluidez y la accesibilidad de los servicios de transporte y logística son fundamentales para el desarrollo de estas actividades, que son vitales para la economía provincial y la proyección del país en el Atlántico Sur.
El cobro exclusivo en dólares y pesos chilenos impuesto por TABSA plantea serios desafíos para la población fueguina. En primer lugar, genera incertidumbre y dificulta la planificación económica de las familias y las empresas locales. La volatilidad del tipo de cambio que se actualiza diariamente y la dependencia del pago exclusivamente en monedas extranjeras sin duda terminarán por pueden perjudicar el poder adquisitivo de los residentes de Tierra del Fuego y afectar negativamente el desarrollo económico de la región.
Tengamos presentes que el incremento del valor del dólar en forma cotidiana, junto con el aumento sostenido en promedio del 5% en los combustibles vuelven insostenibles cualquier tipo de planificación de costo en el medio y largo plazo.
Asimismo, esta medida pone de manifiesto la necesidad de repensar la infraestructura de transporte y logística que ingresa y sale de la isla.
Esto se agrava con la disminución del transporte de carga vía marítima y la concentración de contenedores con insumos casi en forma exclusivamente mediante camiones.
Por esto mismo, dado que la mayor parte de la logística se realiza vía terrestre, es fundamental garantizar la eficiencia y el buen funcionamiento de todos los servicios que intervienen para el traslado de insumos indispensables para garantizar la producción de las empresas instaladas en la provincia y de la población en general.
Esto obliga a las autoridades nacionales, únicas habilitadas para dialogar con las autoridades chilenas, a tomar una rápida y eficaz intervención.
Además de los aspectos económicos, el anuncio de TABSA también plantea una cuestión de soberanía. El ejercicio pleno de la soberanía sobre el Atlántico Sur implica garantizar las condiciones de vida y el bienestar de quienes habitan en la isla de Tierra del Fuego.
Por esto mismo, la protección y el cuidado de los intereses de los fueguinos son esenciales para reafirmar la presencia argentina en la región y fortalecer nuestra posición en la defensa de nuestros derechos soberanos.
Lo acuciante de la situación impone establecer diálogos y negociaciones que permitan encontrar soluciones equitativas y sostenibles para los residentes de Tierra del Fuego, garantizando su acceso a servicios de transporte y logística adecuados y a precios acordes a las posibilidades de la ciudadanía y las empresas instaladas en el territorio provincial argentino.
