Fernando Silva, terapeuta ocupacional de Ushuaia, falleció trágicamente en un choque de lanchas en Brasil, en el día de su cumpleaños. Estaba de vacaciones con dos amigos. Tenía 38 años.
El accidente ocurrió el viernes en Angra dos Reis, Brasil, y dejó como saldo la trágica muerte de Fernando David Silva, un terapeuta ocupacional de 38 años, oriundo de Tigre y residente en Ushuaia, donde se desempeñaba como director en el área de Salud Mental. El siniestro coincidió con el día de su cumpleaños, que Silva celebraba junto a dos amigos, Maximiliano Ayón y Damián Malandra, durante unas vacaciones en el país vecino.
El choque tuvo lugar alrededor de las 11:30 en las aguas de la Praia do Dentista, en la isla de Gipóia. Una lancha con capacidad para 26 pasajeros impactó contra otra más pequeña que transportaba turistas y tripulantes, entre ellos Silva y sus acompañantes. Según los informes proporcionados por los bomberos locales, la embarcación menor sufrió daños severos y se hundió tras el impacto.
Los ocupantes fueron rescatados por la tripulación de la lancha más grande y trasladados al muelle de Santa Luzia, desde donde fueron llevados al Hospital General de Japuíba. Silva falleció poco después de su ingreso.
El accidente también dejó varios heridos, incluidos los argentinos Ayón y Malandra, quienes recibieron atención médica. Ayón fue dado de alta tras las primeras curaciones, mientras que Malandra permanece en observación. Entre los lesionados también se encontraba un niño, según reportaron medios brasileños.
Fernando Silva había llegado a Ushuaia tras la pandemia para asumir un rol fundamental en la Secretaría de Salud Mental de la provincia. A lo largo de su carrera, lideró proyectos innovadores, como la creación de la primera Casa de Medio Camino en Tierra del Fuego, destinada a la inclusión habitacional de personas en tratamiento de salud mental.
“Era un excelente profesional con mucho empuje, con muchas ideas innovadoras en un terreno tan complejo como el de los dispositivos intermedios”, destacó David De Piero, secretario provincial de Salud y Problemáticas de Consumo. Silva coordinó programas como viviendas asistidas, un centro de día y un dispositivo territorial. Además, era conocido por su carácter sociable y su capacidad para establecer vínculos sólidos tanto en el ámbito profesional como personal.
Silva se encontraba en Brasil junto a Ayón y Malandra, dos amigos con quienes ya había compartido un viaje anterior recorriendo la Ruta Nacional N.º 40. En esta ocasión, eligieron las playas de Angra dos Reis para pasar las festividades navideñas y despedir el año. Ayón, compañero de trabajo de Silva en los talleres de sublimado para pacientes de salud mental, y Malandra, contador en un centro de rehabilitación, resultaron heridos en el accidente, pero lograron sobrevivir.
Las autoridades brasileñas iniciaron una investigación para esclarecer las causas del choque. La Municipalidad de Angra dos Reis informó que ambas embarcaciones estaban habilitadas por TurisAngra, mientras que la Marina de Brasil aseguró en un comunicado que no se detectaron riesgos ambientales ni adicionales para la navegación tras el accidente. La lancha menor, llamada Rey David, fue recuperada del fondo del mar en la tarde del viernes.
En paralelo, el Ministerio de Salud de Tierra del Fuego y el consulado argentino en Brasil trabajan para repatriar los restos de Silva.
