La empresa fueguina, con más de una década de trayectoria,
avanza en infraestructura y proyección exportadora, respaldada
por ferias internacionales y programas gubernamentales. Su
nueva planta en Tolhuin marcará un salto cualitativo.
Aguas del Faro, el emprendimiento familiar radicado en Tierra del
Fuego, consolida su crecimiento con miras a la exportación de su agua
mineral, un producto de origen isleño que busca trascender las fronteras
locales. Ariel Baronetti, representante de la firma, detalló en FM Master’s
los avances logrados tras más de diez años de trabajo sostenido:
«Siempre tuvimos el objetivo de hacer un producto de calidad,
originario de la isla, y poder exportarlo tanto al continente
argentino como a otros países. Si bien todavía no lo hemos
concretado, hemos dado muchos pequeños pasos para estar
preparados».
Uno de esos pasos fue la participación en una feria internacional en San
Pablo, Brasil, experiencia que Baronetti calificó como muy positiva y
superadora de expectativas. «Tener la posibilidad de visualizarse
como empresa y comparar el producto en otros mercados
fortalece las estrategias de posicionamiento», explicó, destacando
el rol de los programas provinciales que facilitaron su presencia: «Sin
ese apoyo, no lo podríamos haber hecho de otra forma». La
incursión en Brasil no fue aislada: días después del diálogo, parte del
equipo viajó a una segunda feria en el mismo país, respaldada por la
Cámara de Comercio de Ushuaia y la CAME.
El camino hacia la exportación, sin embargo, requiere ajustes logísticos
y de infraestructura. Baronetti reveló que están finalizando una nueva
planta de embotellamiento en Tolhuin, ubicada junto a la vertiente que
abastece el producto. «Actualmente transportamos el agua a
Ushuaia para envasarla, pero al exponerla al oxígeno, pierde la
catalogación como ‘agua mineral’ y pasa a ser ‘agua de mesa’»,
aclaró. El nuevo establecimiento, emplazado en una zona boscosa sin
servicios básicos, resolverá ese desafío: «Tendremos escala
suficiente y calidad controlada para exportar», afirmó, pese a las
dificultades climáticas y de acceso.
El acompañamiento estatal ha sido clave en este proceso. «Los canales
y ayudas gubernamentales, sobre todo para
microemprendimientos como el nuestro, son fundamentales»,
señaló Baronetti, aunque remarcó que «después está en uno trabajar
ese canal para lograr el objetivo».
Sobre el mercado brasileño, confirmó su potencial: «Tenemos
conocimiento de canales de distribución, precios y cómo colocar
nuestro producto».
Con una mirada optimista, Baronetti aseguró que la exportación es
«súper posible», aunque requiere «asegurar la continuidad del
producto en el destino». Mientras avanzan en la planta de Tolhuin y
analizan estrategias de precios, Aguas del Faro demuestra que la
ambición por crecer, incluso desde el confín austral, se construye con
perseverancia y alianzas estratégicas.