La jueza presidenta del Superior Tribunal de Justicia fueguino
reflexionó sobre los desafíos de la justicia, hizo un mea culpa
institucional y reafirmó la necesidad de acercarse más a la
ciudadanía y el valor de la comunicación.
En una extensa y distendida entrevista en FM Master’s, la Dra. María del
Carmen Battaini, presidenta del Superior Tribunal de Justicia de Tierra del
Fuego, abordó los desafíos que enfrenta el sistema judicial, reconociendo
la necesidad de un «mea culpa» institucional para mejorar su imagen y
acercarse a la ciudadanía.
«Sabemos que no tenemos buena imagen, pero no todo es así. Créanme
que hay muchos, y la mayoría, que trabajan 7×24 en función de sus roles,
atendiendo de la mejor manera posible y con los elementos que nos
corresponden todas las problemáticas que tenemos», afirmó.
Battaini destacó como otros de los desafíos, la gestión (puertas adentro),
la formación en términos tecnológicos y de innovación, y el valor de la
comunicación con la sociedad a través de los medios.
Battaini destacó que la sociedad hoy atraviesa “vulnerabilidades de todo
tipo», que no se limitan a lo económico o la violencia, y que requieren de
la interacción con otros sectores para su solución. «Ese es un desafío muy
grande que tratamos de abordar también», señaló.
Además, subrayó la importancia de modernizar la gestión judicial, un área
en la que los jueces no están tradicionalmente formados: «Todo lo que
tiene que ver con la gestión, que nosotros no estamos preparados para
eso, pero que tenemos como una competencia transversal más a
incorporar a nuestros saberes para darnos cuenta que el liderazgo dejó de
ser el autoritarismo per se o por sí mismo, sino que necesitamos
liderazgos horizontales, escuchar a nuestros equipos de trabajo para
poder brindar respuestas. Todos somos líderes, cada uno en un
porcentaje y cada uno en la medida que corresponda».
Respecto a los tiempos de la justicia, la jueza reconoció la lentitud del
sistema frente a los cambios sociales. «Cómo me gustaría que todo
pudiera ser inmediato, que la evolución fuera inmediata, pero nuestro
sistema, lamentablemente, no lo permite», expresó. Sin embargo, destacó
avances como el sistema acusatorio, que permitirá una mayor
participación de las víctimas y una dinámica más ágil. «El acusatorio va a
resolver muchos de estos temas porque va a hacer masajes, se va a dar
intervención a la víctima, o sea, va a variar la mentalidad y la dinámica,
pero de aquí a que ello acontezca, a lo mejor cuando acontece ya
tenemos otro sistema probado en alguna parte del mundo que ha
evolucionado más con los mismos resguardos de derechos y garantía»,
explicó.
Battaini también se refirió a su decisión de permanecer en Tierra del
Fuego, rechazando oportunidades en cargos federales. «Es verdad, he
sido unas cuantas veces (nombrada para cargos nacionales). No se ha
llegado, agradezco que no se haya llegado a completar, porque yo me
siento, desde que decidí venirme a Tierra del Fuego y concursar para el
cargo en el que estoy, yo asumí que era fueguina, o sea que para mí mi
provincia era esta», afirmó.
Con 52 años de trayectoria en la justicia, 22 de ellos en Tierra del Fuego,
la jueza enfatizó su compromiso con la provincia: «De hecho, toda mi
familia está acá en Tierra del Fuego, y mi desafío, y para mí el mayor, me
sentiría honrada de poder terminar mi carrera en esta provincia que tanto
quiero, y a la que le dedico con todo cariño y con todo amor mi tarea».
Con una carrera dedicada a la justicia y un profundo arraigo en Tierra del
Fuego, María del Carmen Battaini reafirma su visión de una justicia más
cercana, moderna y comprometida con su comunidad, mientras rechaza
cualquier posibilidad de abandonar la provincia que considera su hogar.
