El secretario general del SADOP habló sobre la decisión del Gobierno provincial de pagar por decreto un bono para el sector docente, que solo lo percibieron quienes trabajan en el sector público, y no así los docentes de colegios de gestión privada que representa.
Marcelo Ovejero, secretario general del Sindicato Argentino de Docentes Privados de la región, compartió sus reflexiones sobre la decisión del Gobierno de la Provincia de Tierra del Fuego de otorgar un bono por decreto a los docentes, y su preocupación por la falta de inclusión de los maestros de colegios de gestión privada en esta asignación.
«Hace bastante tiempo ya que se venía amagando con esta situación de una suma fija, que sí, que no, que se iba a dar por decreto. A nosotros nos tomó un poquito por sorpresa, aun cuando sabíamos esto, porque confiábamos en que se iba a insistir en llegar a un acuerdo y no en hacerlo por decreto. Nos enteramos ayer que salió el decreto. Por supuesto que al instante empezaron a llover las consultas», explicó Ovejero, por FM Master’s.
La decisión de no incluir a los docentes de la gestión privada en esta asignación ha suscitado una serie de preocupaciones en el sector. Ovejero enfatizó que a pesar de que realizan la misma labor que sus colegas de la gestión pública, ganan menos debido a la falta de garantía legal en sus asignaciones: «Si esto hubiera sido un aumento al básico no estaríamos discutiendo esto, pero justamente el que dice que no puede dar un aumento al básico, es el Estado, es el gobierno», señaló Ovejero.
La ley establece que el Estado debe garantizar el aporte financiero para el pago de los haberes de los docentes de escuelas de gestión privada, lo que, según Ovejero, debería ser un hecho innegable. Sin embargo, la falta de definición genera malestar y confusión en un contexto económico complejo.
“Con todo lo que sean estas asignaciones extraordinarias fijas, o bonos, siempre hay un conflicto en el medio porque se produce esta indefinición que debería estar prevista, me parece, me llama la atención que no se prevean estas cosas, que es histórico, no es de ahora, esto pasa siempre” recalcó el sindicalista.
Los docentes de la gestión privada sienten que su trabajo es subestimado y marginado en esta situación. Consideran que su labor es fundamental para la educación y no comprenden por qué no se les tiene en cuenta de manera equitativa.
A pesar de estas dificultades, el diálogo con las autoridades se ha vuelto cada vez más limitado. Ovejero destacó que solo mantienen un diálogo con la Dirección de Privada, cuya capacidad de decisión es limitada.
La falta de información clara sobre el a docentes de la gestión privada también ha generado incertidumbre en los establecimientos educativos. Ovejero expresó que han enviado notas a los representantes legales de las escuelas para explicar su posición y esperar una resolución.
