“Yo veía que la causa estaba muy parada. Se trabajaba sólo a partir de los datos enviados por la gente. Y lo hacía la policía. Le pedí que se volviera al camping y contestó que no. Ojalá que un nuevo juez tenga mejores ideas para continuar la búsqueda”, explicó María Elena Delgado, la madre de Sofía, en declaraciones a la agencia Télam.
Según la agencia periodística, la madre de Sofía reprobaba la investigación llevada adelante por el ahora suspendido juez de la causa, Daniel Cesari Hernández, y no dejó de responsabilizar al magistrado por la falta de resultados.
Lo cierto es que el Consejo de la Magistratura decidió suspender de su cargo al juez penal Daniel César Hernández, quien estaba, entre otras causas en instrucción, a cargo de la investigación sobre la desaparición.
Las denuncias presentadas desde distintos ámbitos judiciales indican que Cesari Hernández no solo maltrataba a los empleados de su juzgado, sino que también trataba de la misma manera a funcionarios de otras reparticiones e incluso a las víctimas de los delitos que investigaba.
Estas acusaciones fueron expuestas el 17 de marzo de este año por dirigentes de la Unión de Empleados Judiciales de la Nación (UEJN) durante una reunión con el presidente del Superior Tribunal de Justicia, Gonzalo Sagastume.
Tras las denuncias, el caso fue remitido al fiscal mayor de la ciudad de Río Grande, Martín Bramatti, quien inició una causa penal contra el juez.
La investigación aún está en curso bajo la supervisión de la jueza Cecilia Cataldo, a cargo del Juzgado de Instrucción Nº3 de la ciudad.
Sin embargo, a pesar que la instrucción contra Cesari Hernández aún no está concluida, el fiscal acusador Abdo González Saber presentó cargos contra Cesari Hernández por «mala conducta e inhabilidad moral sobreviniente», debido a los presuntos maltratos cometidos tanto hacia los justiciables, incluyendo presuntas víctimas, como hacia los empleados y funcionarios del juzgado, peritos y policías.
A esta imputaciones se le suman actuar con morosidad y negligencia en el cumplimiento de sus funciones, lo que generó demoras y acumulación de causas debido a la deficiente organización laboral que implementó, según se explicó desde el Consejo de la Magistratura.
Otra acusación en su contra fue la de intentar modificar conclusiones periciales, lo cual fue revelado en el acta 611 del Consejo de la Magistratura. Estas acusaciones, respaldadas por declaraciones testimoniales y otras pruebas recopiladas en la causa penal, llevaron al Consejo a tomar la decisión de suspender preventivamente al magistrado y prohibirle acercarse a los testigos del caso.
Como se informó en este medio en la edición de ayer, Cesari Hernández fue suspendido y recibirá el 60% de su salario, de acuerdo con lo estipulado en la resolución judicial.
Una de las últimas acciones de Hernández en el caso fue negarse a ordenar un examen de ADN compulsivo a una joven que guarda un gran parecido físico con Sofía y que fue encontrada en la provincia de San Juan. Esta medida ha sido solicitada reiteradamente por María Elena Delgado, la madre de Sofía.
El juez había argumentado que no era necesario realizar la prueba genética, ya que la documentación y otras medidas de prueba ordenadas descartan la posibilidad de que la joven sea Sofía.
