Osvaldo acaba de cumplir 50 años, está casado y es padre de mellizos. A los 18 años fue reclutado para pelear en Malvinas y hace poco descubrió que es intersexual y decidió cambiar su partida de nacimiento. Hoy es mujer y se llama Tahiana.
Fueron siete los jóvenes del pueblo en el que vivía -Corral de Bustos, Córdoba-, que fueron reclutados para la guerra. Tahiana cumplió los 18 en Malvinas, y cuando estaban en el avión les dijeron que iban a un entrenamiento. “A nuestras familias les enviaron un telegrama después, cuando ya estábamos allá. Los felicitaban porque nosotros estábamos defendiendo la soberanía», le dijo al portal Infobae.
Lo que siguió fueron más de 70 días refugiado en los llamados pozos de zorro, en la Bahía Fox: fosas de menos de 2 metros de profundidad por 2 de ancho, con techos disimulados con tierra y pasto que construyeron para que no los vieran desde los aviones.
Luego de la guerra, auqel soldado llamado Osvaldo Marrone se culpaba por no haber podido mantener la soberanía. Al año siguiente empezó a trabajar en el sector administrativo del casino de Corral de Bustos. «Ya me había dado cuenta de que tenía cada vez más sensaciones femeninas y menos masculinas: no tenía espermatozoides, nada. Mis genitales no funcionaban. Ahí tomé coraje y fui a ver a un endocrinólogo. El médico me dijo que la solución era inyectarme testosterona. Fue un poco de error mío, por no saber, y error del médico, por decidir forzarme con hormonas a ser alguien que yo no sentía».
Lo que la medicina logró en Tahiana fue silenciar su parte femenina y potenciar la que coincidía con sus genitales. Así, aquel hombre de 30 años, se enamoró, se casó y se convirtió en padre de mellizos (hoy tienen 22 años). «Sentí alivio porque encajaba con lo que pedía la sociedad, que fuera varón o que fuera mujer. Pero la verdad es que eso otro seguía latente».