La población objetivo son niños y niñas de entre 1 y 5 años. La campaña culmina el 13 de noviembre, y es obligatoria y gratuita. Se trata de dosis de refuerzo de triple viral, contra sarampión, rubéola y paperas, y polio.
La Dra. Ariana Benetucci, responsable de la Campaña Nacional de Vacunación, que se lleva adelante en estas semanas en Tierra del Fuego, señaló que “tenemos el 50% de la población objetivo, pero es más lento que lo esperado, como ocurre en todo el país”. Este promedio provincial, de niñas y niños vacunados, supera en muy poco al promedio nacional. La campaña lleva cuatro semanas y continúa hasta el 13 de noviembre.
Benetucci convocó a aquellas familias de niños que aún no han recibido sus dosis adicionales de la campaña, que se acerquen hasta el 13 de noviembre para que se les pueda aplicar las vacunas, la triple viral, contra sarampión, rubéola y paperas, y contra la poliomielitis. “No se necesita orden médica, es sin turno previo, por orden de llegada y con la libreta de vacunas, quienes cuentan con ella” informó.
La importancia de la campaña reside en que las dosis adicionales permitirán sostener la eliminación de estas enfermedades. “Si no nos vacunamos en caso de que se introduzca un caso importado, estaremos en riesgo que se propaguen” agregó.
La razón por la cual se aplican las dosis, obligatorias y gratuitas, en el grupo de edad que va de los trece meses, es decir un año y un mes, hasta los cuatro años y un día antes de cumplir cinco, es que los más pequeños “algunos tienen las vacunas del calendario incompletas y porque aún con el esquema al día, las primeras dosis a su edad pueden no ser suficientes para hacer frente a una exposición a estas enfermedades. Son los más propensos a hacer complicaciones” refirió.
En término de consecuencias de estas enfermedades, mencionó secuelas serias como cardiopatías, en el caso de sarampión encefalitis, problemas cardíacos, ceguera. Mientras que la polio genera parálisis que generalmente se va a la vía respiratoria y no tiene tratamiento específico: “Por eso son tan preocupantes y porque además no se han eliminado del resto del mundo. Es necesario evitar que vuelvan estas enfermedades a la Argentina y para eso tenemos que estar bien vacunados”.
La Dra. indicó que, si algún niño o niña estuvo enfermo, mientras no tenga fiebre puede asistir a vacunarse. La contraindicación temporaria es si tiene más de 38º de fiebre, que, al transcurrir uno o dos días sin fiebre, ya puede recibir la dosis.
“Los adultos tenemos la responsabilidad de la vacunación de los chicos, tenemos que hacernos cargos como responsables de hacerlo” instó luego la médica, para remarcar además que en Ushuaia son nueve los centros de salud, además del hospital modular donde se pueden vacunar. También en el centro de salud de Tolhuin y en Río Grande en doce centros de salud y en el hospital.
La mayoría de los centros están abriendo los días sábados y si bien también se inició la vacunación casa por casa en forma paralela, “es un esfuerzo muy grande para el equipo de salud porque no todas las personas se encuentran en determinado horario en el domicilio, hay dificultades geográficas, el tema de los perros callejeros y lo que implica” finalizó la Dra. Ariana Benetucci.
