Luego del parate generado por el COVID-19 y las dificultades que se generaron para sesionar en el Congreso, los jefes parlamentarios comenzaron a avanzar en la posibilidad de realizar sesiones virtuales.
En ese sentido se desarrolló una reunión entre Cristina Kirchner, en su rol de presidenta del Senado, José Mayans, jefe del boque oficialista y Luis Naidenoff, jefe del bloque opositor.
Allí la vicepresidenta les entregó las pautas con las que piensa llevar adelante las sesiones remotas, luego de que la Corte Suprema se negara a opinar sobre la validez de las mismas y le otorgara al Senado la potestad de definir el modo de sesionar.
Esto incluye la posibilidad de que la presidencia del cuerpo esté presente en el recinto junto con los secretarios y prosecretarios necesarios para la sesión y los senadores conectados desde el lugar que deseen.
De acuerdo a la propuesta, la presencia de los senadores se contabilizará en el tablero del recinto y la votación se realizará por un sistema electrónico instalado en las computadoras de los legisladores.
En cuanto a la Cámara de Diputados, su presidente Sergio Massa se reunió con el ministro del Interior, Eduardo de Pedro y actualizaron el acuerdo con el Registro Nacional de las Personas (Renaper), que garantizará la identificación de los legisladores que participen de la próxima sesión virtual.
La situación allí todavía no está definida y por eso se reunió la comisión de Modernización que avanzó en la redacción del protocolo de la sesión, pero la letra final se terminará de escribir en las próximas horas, en tanto que mañana se analizará en una reunión a partir de las 11.
