En un giro sorpresivo, la Asociación Trabajadores del Estado (ATE) en Tierra del Fuego experimenta una fisura interna evidenciada luego de la firma de un acuerdo salarial en Río Grande, que generó fuertes críticas del titular de ATE provincial, Carlos Córdoba.
En Aire Libre FM, Córdoba expresó su malestar tanto con el Gobierno provincial como con los secretarios generales que «firmaron sin consultarnos».
La discrepancia se centra en la falta de participación de ATE en la toma de decisiones respecto al incremento salarial en Río Grande. Córdoba afirmó que se enteraron después de que el acuerdo estaba sellado, generando un fuerte malestar en la organización sindical. Según Córdoba, la falta de consulta obliga a presentar una práctica desleal al Ministerio de Trabajo.
El conflicto salarial se agrava dado el contexto de la carpa instalada por ATE frente a Casa de Gobierno, en Ushuaia, donde los trabajadores llevan adelante medidas de fuerza exigiendo mejoras salariales y en la obra social.
Córdoba destacó la incongruencia de la situación, señalando que, mientras están en medio de negociaciones y luchas sindicales, algunos secretarios generales firmaron acuerdos sin la participación de la estructura provincial.
«Estamos discutiendo este 5% que tenemos para cobrar en noviembre, que sea un 5 más, esto tiene que ver con el Municipio, donde tenemos negociado casi un 105% y en caso de firmar estaríamos arriba del 110 o 115 %, no quedamos no muy lejos, como quedamos con Gobierno», explicó.
La crítica principal es que estas decisiones afectan a todos los trabajadores y, por ende, deberían discutirse de manera transparente y participativa.
El secretario general de ATE a nivel provincial también destacó la situación precaria que atraviesan los trabajadores que mantienen la carpa frente a Casa de Gobierno. Incluso mencionó un episodio en el que una familia de estatales debía elegir entre el almuerzo y la cena debido a sus limitaciones económicas.
La división en ATE se profundiza aún más con la marcada diferencia de posturas entre las agrupaciones de ATE Río Grande y Ushuaia. Mientras ATE Río Grande firmó el acuerdo salarial con el Gobierno provincial, sumándose a ATSA y UPCN, ATE Ushuaia mantuvo la carpa y realizó una marcha con más de 200 estatales. Consideran insuficiente lo firmado en Río Grande, especialmente cuando la pérdida salarial alcanza el 70%.
«Consideramos insuficiente lo firmado en Río Grande cuando tenemos una pérdida salarial del 70% y hay que entrar en una recuperación del salario, hasta que no nos llamen seguimos en el acampe y hoy tomaremos decisiones de cómo seguir con las medidas», plantearon desde ATE Ushuaia.
La brecha interna y las discrepancias estratégicas auguran un escenario incierto para el sindicato de estatales en Tierra del Fuego.