La Asamblea General de la ONU demandó al Reino Unido que se retire en un plazo de seis meses del archipiélago de Chagos, situado en el océano Índico y sede de una importante base militar alquilada por Londres a EE.UU.
La decisión, no vinculante, fue aprobada con 116 votos a favor, 6 en contra y 56 abstenciones, una clara derrota para los Gobiernos británico y estadounidense, que habían hecho campaña contra el texto.
“Es una buena noticia porque se habla de un equivalente a un resabio de colonialismo en el siglo XXI”, dijo Andrés Dachary, a cargo del área de Relaciones Internacionales del Municipio de Río Grande
Y agregó que “tiene que ser tenido en cuenta, es un buen signo del ámbito internacional porque implica un retroceso en el colonialismo en el mundo”.
La nación del Índico, que se independizó del Reino Unido en 1968, reclama esas islas al considerar que Londres las separó de su territorio de forma ilegal tres años antes de la independencia.
El caso es similar al reclamo de soberanía sobre las Islas Malvinas, que el estado provincial viene defendiendo en la asamblea permanente de descolonización, en la ONU. Sin embargo, por estos días salió a la luz la polémica sobre la adjudicación de la cuenca de Malvinas a empresas extranjeras para la explotación de los recursos naturales.
“Todo lo que ha pasado en estos últimos años es consecuente con el planteo de una falacia, que los recursos naturales no constituyen nuestra soberanía, y es un aumento fácil de rebatir. Es peor con lo que hemos visto con el otorgamiento de bloques petrolíferos en la cuenca de Malvinas a empresas que tienen en su directorio a funcionarios del gobierno ilegitimo de las islas y a empresas que saquearon recursos de las islas desde el 2007”, dijo Dachary por Fm Del Pueblo.
Según el funcionario, “es una mirada política que tiene cancillería desde el 2015, y lo hemos denunciado permanentemente desde el municipio”.