En horas de la mañana del martes, se llevó adelante una nueva jornada del juicio oral y público contra tres personas acusadas de atacar salvajemente a padre e hijo el pasado mes de enero en la zona de Margen Sur.
La jornada comenzó con la sorpresiva declaración de Federico Sebastián Arrua, quien solicitó dirigirse hacia el Tribunal.
Así fue que los magistrados le tomaron declaración indagatoria a uno de los imputados, quien reconoció haber sido el autor del ataque con la piedra contra Enrique Jesús Nuñez, provocándole una fractura y hundimiento de cráneo.
Asimismo, intentó desligar de cualquier tipo de responsabilidad a su esposa Lorena Anahí Martínez y su primo Jorge Andrés Isfran, ambos imputados por el mismo delito.
A pesar de adjudicarse la autoría del ataque, brindó un relato carente de sustento y con diversas incongruencias, principalmente sobre la presencia de la mujer en el lugar del ataque.
Por otro lado, colocó a otras personas en el lugar, asegurando desconocerlas, pero al momento del ataque, se sumaron en las agresiones a los Nuñez, incluso portando armas blancas.
Una vez finalizada la indagatoria del imputado Arrúa, se hizo presente Enrique Jesús Nuñez junto a su hijo, a prestar declaración testimonial ante los Jueces Juan José Varela, Daniel Borrone y Eduardo López.
Así fue que brindó una versión de los hechos muy diferente a los declarados minutos antes Arrua.
Nuñez aseguró que previo al ataque, conocía a Isfran, ya que era su vecino en la Margen Sur. En relación al violento hecho, relató que fueron atacados por cinco personas, los tres imputados y dos personas más, las cuales por sus propias tareas investigativas, logró individualizar a Gastón Quiroz y María Martínez, hermana de la imputada. Estas últimas dos personas nunca fueron vinculadas con el hecho a pesar de la investigación que llevó adelante, tanto la policía, como el Juzgado de Instrucción N°1.
Ante la declaración de la víctima al brindar datos sobre dos personas más involucradas en el hecho, los magistrados se vieron sorprendidos, por lo que le consultaron sobre la información brindada de las identidades de estas personas.
Allí explicó que luego del ataque, comenzó a investigar por sus propios medios, y al cabo de unas semanas luego de salir de Terapia Intensiva, tomó conocimiento de las identidades de estas personas. Lo más sorprendente fue que luego de declarar ante el magistrado que llevaba adelante la instrucción de la causa, no volvió a ser convocado por lo que la Justicia no logró acceder a dicha información.
Finalmente, Nuñez logró reconocer dos de los chuchillos secuestrados, como los que portaban los atacantes como así también, la vestimenta de su hijo todo rasgado producto del enfrentamiento. Asimismo, le exhibió la herida sufrida por el golpe recibido por Arrua y que le provocó la fractura e hundimiento del cráneo. Allí explicó que se le debió colocar una prótesis y que al día de hoy, ya transcurridos casi nueve meses, la herida aún continúa supurando.