Concluyó un breve juicio oral y a puertas cerradas en los Tribunales Judiciales de la ciudad de Ushuaia. Allí un joven de unos 24 años se encontraba acusado de haber cometido amenazas y grooming a tres menores de edad en el año 2014 en la capital provincial.
Si bien el debate oral se llevó adelante a puertas cerradas (debido a que las víctimas eran menores de edad), fuentes judiciales explicaron que la causa se inició luego de tomar conocimiento de que el imputado, un joven mayor de edad, le solicitaba a las víctimas fotografías eróticas, amenazándolas luego con divulgarlas a las imágenes a través de las redes sociales.
El debate comenzó con la lectura de elevación de la causa a juicio por parte del Fiscal Eduardo Urquiza, quien realizó una alocución, brindando detalles de los hechos que fueron denunciados y las pruebas que surgieron a lo largo de la investigación.
Una finalizada, los miembros del Tribunal de Juicio, integrada por los magistrados Alejandro Pagano Zavalía, Maximiliano García Arpón y Rodolfo Bembihy Videla, ofrecieron al acusado prestar declaración indagatoria. Allí por recomendación del abogado defensor Alejandro Berola y Salvador Parodi, accedió a declarar.
Así fue que el acusado reconoció los hechos que se le imputaban, reconociendo su error, mostrando arrepentimiento, al tiempo que solicitó disculpas para las víctimas por los hechos.
Una vez finalizada la declaración del imputado, se pasó a un cuarto intermedio para el mediodía, momento en que las partes accedieron a brindar sus alegatos.
Allí el representante del Ministerio Público Fiscal solicitó una pena de tres años de prisión en suspenso.
Finalmente y tras una breve deliberación, los integrantes del Tribunal Oral resolvieron hacer lugar al pedido del Fiscal, condenando a la pena de tres años de prisión en suspenso por los delitos grooming en concurso ideal con amenazas coactivas, y estos a su vez, en concurso real con amenazas coactivas en perjuicio de tres menores de edad, hecho ocurrido en el año 2014 en la ciudad de Ushuaia.
Según informaron fuentes judiciales, el acusado fue condenado por dos hechos, en el primero de ellos, habría amenazado en forma coactiva, obligando a 2 niñas a enviarles fotografías con contenido erótico, a quienes luego les solicitó que accedan a un encuentro personal. Las amenazas consistían básicamente en “hacer públicas las conversaciones y escarchar a las nenas en la escuela”. Cabe destacar que las conversaciones se produjeron a través de los sistemas de WhatsApp y la red social Facebook.
Allí el condenado habría simulado encontrarse enamorado, “con el único fin de lograr un encuentro sexual con la menor”.
Por otro lado, el segundo hecho por el que fue llevado a juicio, es el contacto que habría mantenido vía WhatsApp, con una niña que al momento de la denuncia (año 2015) tenía 13 años, cuando el hombre le pidió a la adolescente que se sacara fotos y se las enviara, y a quien además trató de convencer para mantener un encuentro íntimo, a cambio de ofrecerle dinero en efectivo.
No obstante, a raíz de la negativa de la niña, “el hombre amenazó con publicar una foto de ella, aparentemente trucada o editada, de su rostro y partes íntimas en su Facebook”.
