La «Marcha Federal por Paz y Trabajo», arrancará con columnas desde La Quiaca (Jujuy), La Rioja capital, Posadas, Bariloche y Ushuaia, y confluirá el viernes en la Ciudad de Buenos Aires.
Encabezada por la Corriente de Trabajadores de la Economía Popular (CTEP), Barrios de Pie, y la Corriente Clasista y Combativa (CCC), la movilización cuenta también con el apoyo de gremios como La Bancaria y Camioneros, y de la CTA de los Trabajadores, encabezada por Hugo Yasky.
Además de exhibir el descontento, la manifestación tiene como objetivo impulsar el tratamiento de cinco leyes que ya ingresaron a la Cámara de diputados y que reclaman la emergencia alimentaria, integración urbana, infraestructura social, adicciones y agricultura familiar.
La iniciativa de emergencia alimentaria incluye un relevamiento para detectar casos de malnutrición o en riesgo de estarlo para brindar asistencia mediante bonos alimentarios, mientras que la de integración urbana plantea «regularizar y urbanizar los barrios humildes para mejorar la prestación de los servicios».
En infraestructura social, exigen «garantizar que el 25 por ciento de las obras públicas sean realizadas por cooperativistas de trabajo».
Además solicitan que el Congreso trate un ley de adicciones que incluya la asistencia en casos de consumo y una ley de agricultura familiar para «proteger a las familias que poseen y trabajan sus tierras».
De acuerdo con lo previsto, las columnas que atravesarán las provincias del Noroeste, Noreste, Cuyo y la Patagonia confluirán el viernes a partir de las 9 en el Puente Pueyrredón y en Liniers para, desde allí,marchar hacia el Congreso Nacional, donde realizarán un acto a partir de las 14.