El senador analizó el primer año del gobierno de Milei. Destacó algunos logros económicos, pero muchas falencias, especialmente en materia institucional. Consideró que la oposición es, en líneas generales, “muy complaciente”.
El senador nacional por Tierra del Fuego, Pablo Blanco (UCR), ofreció un análisis crítico del primer año de gestión del presidente Javier Milei, señalando tanto avances económicos como importantes retrocesos, especialmente en materia institucional. Blanco, en FM Master’s, expresó su preocupación por lo que considera una actitud complaciente de gran parte de la oposición y cuestionó severamente el uso reiterado de decretos de necesidad y urgencia (DNU) por parte del Ejecutivo, los cuales, en su opinión, han relegado al Congreso a un rol secundario.
El legislador destacó algunos logros numéricos de la administración nacional, mencionando la disminución de la inflación, la estabilidad del dólar y la baja del riesgo país como puntos positivos. Sin embargo, subrayó que estos indicadores no reflejan necesariamente mejoras en la vida cotidiana de los ciudadanos. “Hay otros números que preocupan, como la pérdida de actividad económica, la pérdida de fuentes de trabajo y el cierre de empresas”, afirmó, reconociendo que estos problemas han generado un impacto negativo en varios sectores.
Blanco fue particularmente enfático al señalar un retroceso en el respeto por el funcionamiento institucional. Según explicó, la utilización excesiva de los DNU por parte del Gobierno ha socavado la relevancia del Congreso. “Está prácticamente gobernando haciendo caso omiso al Congreso de la Nación”, manifestó, haciendo referencia específica al DNU 70/23, que según él permite al Ejecutivo actuar sin las limitaciones propias de un sistema republicano.
Además, consideró que la oposición no ha sabido poner límites claros al avance del Ejecutivo: “Hay una quietud más que marcada por parte de la oposición, y me hago cargo, por el sector que representamos nosotros, aunque no por mi manera de pensar y actuar”.
El senador también cuestionó el manejo del presupuesto 2025, asegurando que las estrategias del Gobierno Nacional apuntan a reconducir el presupuesto de 2023, lo que limitaría aún más el control legislativo sobre los recursos extraordinarios.
Según Blanco, este esquema permitiría al Ejecutivo exhibir cifras de superávit fiscal y déficit cero que, en realidad, se lograrían a expensas de las provincias. “El que soporta el superávit y el déficit cero de la Nación son las provincias”, afirmó, en una clara alusión al costo que implica para las jurisdicciones provinciales la política económica del gobierno nacional.
También dirigió críticas hacia sus colegas del Congreso, tanto del oficialismo como de la oposición. Según expresó, “muchos integrantes, no del oficialismo, sino de la oposición, son complacientes”.
Blanco manifestó su descontento por la falta de sesiones en el Senado, algo que atribuyó al temor de algunos legisladores de derogar decretos que otorgan amplias facultades al Ministro de Economía para renegociar la deuda. “Hace más de 60 días que el Senado no funciona”, lamentó.
Asimismo, señaló responsabilidades compartidas entre los gobernadores provinciales, a quienes acusó de aceptar pasivamente promesas incumplidas del Gobierno Nacional. Blanco hizo referencia a la problemática de las cajas de jubilaciones provinciales, destacando que, aunque el Senado aprobó una ley para resolver este asunto, el veto del Ejecutivo fue respaldado por legisladores instruidos por los propios gobernadores para no insistir en su sanción. “El gobierno promete, pero no cumple, y los gobernadores aceptan mansamente que el gobierno una vez más les vuelva a mentir”, afirmó.
Finalmente, el senador Pablo Blanco expresó su preocupación por la falta de una alternativa política viable que pueda posicionarse entre los extremos representados por el actual gobierno y la gestión anterior. Según su análisis, esto contribuye a un panorama de estancamiento político y mediático que no ofrece soluciones reales a los problemas del país. “Muchos no ven una opción distinta, o es Milei o es volver a lo anterior”, concluyó.