Por Silvana Minué- El pasado viernes se llevó adelante un taller virtual sobre la Diversidad Corporal, Hackeo del ideal de belleza a cargo de Lala Pasquinelli.
La actividad fue organizada por la diputada nacional Rosana Bertone para entender qué es la diversidad corporal o los ideales de belleza en la sociedad.
Lala Pasquinelli es activista feminista, poeta y abogada. Es fundadora del colectivo Mujeres Que No Fueron Tapa y del Festival de Hackeo de Estereotipos en Escuelas, autora del libro #NosTenemos, creadora de la campaña #HermanaSoltaLaPanza y oradora TEDex.
En declaraciones a FM MASTER´S, la titular del colectivo Mujeres Que No Fueron Tapa indicó que el encuentro realizado la semana pasada fue muy «enriquecedor» y «una experiencia muy profunda como interesante».
Y explicó que se abordó la diversidad corporal y el ideal de la belleza que «tiene una implicancia, una construcción de lo femenino, desde pequeñas se nos educa para ser lindas y encajar en el ideal de belleza, y si no encajamos podemos esperar el fracaso, no importa cuál es tu profesión o tus deseos, siempre serás juzgada por tu apariencia física. Entonces discernimos algunos conceptos, entendimos cómo funciona, y esto no tiene que ver si es sentirse más gorda o flaca, sino que es algo más profundo que viene desde la educación desde la vergüenza, o ejercida desde la violencia y también tendrá consecuencias en los espacios que nos vamos a animar a ocupar en la sociedad. Educadas en esa idea de que estamos falladas o no estamos a la altura difícilmente podemos poner ocupar un lugar donde tengamos una voz».
«Frente al activismo corporal hay reacciones bastantes violentas y este verano vimos bastante» aseveró, y ejemplificó el caso de Moria Casan o el de la pequeña hija de Isabel Macedo, en que muchos usuarios y usuarias de las redes sociales, la «mandaban» a hacer dieta o «cuidarla» porque tenía muchos «rollos».
Para Pasquinelli «es algo que siempre va a suceder y aparece el discurso de que es un tema de salud y no es de discriminación, y la verdad que es mentira y no se puede diagnosticar la salud de una persona a través de una foto».
Entonces «con las personas que uno no está de acuerdo con sus hábitos alimentarios o su cuerpo, se considera que se está en derecho a discriminar o controlar y segregarla. La violencia sobre los cuerpos gordos tiene que ver con todos los géneros, pero a las mujeres hay un ensañamiento y se le exige una condición de existencia, en los varones estar un poco gordo no lo deja de lado el mercado, en cambio si se hace en las mujeres, se les cierra la puerta en todos lados, entonces es un dispositivo de control».
Finalmente, apuntó que para tratar de buscar «un alivio» se debe entender cómo funciona ese sistema de discriminación «y cuando se logra entender de que esto no tiene que ver con vos, no estás rota, sino que no tenés intención de someterse a los hábitos de opresión para tener esa belleza ideal. Esto no se destruye en soledad, necesitamos espacios de sororidad y de conversación».
