Aproximadamente desde las fiestas de fin de año, se observa una inusual cantidad de hechos delictivos, principalmente en domicilios deshabitados por vacaciones.
Desde las celebraciones de fin de año, la ciudad de Río Grande ha experimentado un inusual incremento en la cantidad de robos, especialmente en domicilios deshabitados durante el período vacacional.
La situación genera inquietud entre los vecinos y comerciantes, quienes reportan una frecuencia de hechos delictivos mayor a la habitual para la época.
Los robos se han registrado en distintos puntos de la ciudad, con denuncias que describen situaciones alarmantes. En algunos casos, los domicilios afectados han sido prácticamente desvalijados. Según relatan los habitantes, se trata de varios hechos delictivos por día, un panorama que ha encendido las alertas en la comunidad.
El martes 7 de enero, uno de los episodios más significativos tuvo lugar en la recicladora Metales del Sur, ubicada en la calle 25 de Mayo al 3050. Los trabajadores que acudieron al lugar para iniciar su jornada laboral se encontraron con un escenario de vandalismo y robo.
Un día después, el miércoles por la tarde, otro robo fue descubierto en una vivienda del barrio Los Cisnes, en la intersección de las calles Desdémona y Los Flamencos. Este hecho, sumado a otros similares, refleja un patrón preocupante que las autoridades locales deberán atender.
Si bien los robos en períodos vacacionales no son inusuales, lo que distingue a este verano es la cantidad de delitos reportados en un lapso tan breve. Los vecinos expresan su temor por lo que consideran un aumento «alarmante» en los índices de inseguridad.
Mientras tanto, los habitantes de Río Grande adoptan sus propias precauciones, buscando proteger sus hogares y pertenencias en un ambiente que, por el momento, se siente particularmente vulnerable.